
•Algunos solo asisten de oyentes porque no tienen la edad que requiere la institución o carecen de su documentación
Menores de entre 8 a 14 años que viven en la colonia Ladrillera Norte y que no tiene oportunidad de asistir a una escuela, o que por su condición cultural o migrante abandonaron las aulas, son atendidos por el Instituto Chihuahuense de Educación para los Adultos (ICHEA), bajo programas específicos.
Debido a que la atención de la institución es para jóvenes y adultos mayores de 15 años, la dependencia aprovecha un programa especial denominado “10-14”, con el que, por medio de un permiso especial federal, los menores en este rango de edad pueden estudiar y certificar su primaria.
De acuerdo con el titular del ICHEA, Eberto Javalera Lino, en este caso los niños de la colonia Ladrillera Norte que cubren el perfil “10-14” son atendidos de manera regular, pero a los menores de ese rango de edad, se les recibe como oyentes, a fin de que se interesen en la educación.
La colonia Ladrillera Norte se ubica en el kilómetro 23 de la carretera a ciudad Juárez, por lo que los niños y jóvenes tienen que recorrer varios kilómetros de terracería para poder tener acceso a las colonias que cuentan con escuelas.
A esta zona que se ha convertido en un asentamiento tarahumara acude continuamente el personal del ICHEA para realizar actividades de promoción y registro en las viviendas, además de formar círculos de estudios y aplicaciones de exámenes en el lugar para toda la población, incluyendo a niños, jóvenes y adultos.
“Se atiende el rezago educativo en todo el estado y esta comunidad brindamos apoyo material, asesoría y certificación luego de las visitas domiciliares que nos permiten identificar a las personas que no saben leer y escribir o que no cuentan con la primaria y secundaria”, dijo Javalera Lino.
Explicó que el programa “10-14”estédiseñado para certificar a niños de entre 10 y 14 años,quienes por diversas circunstancias de vulnerabilidad no pueden asistir en el sistema escolarizado, para que estudien mediante un permiso especial y puedan certificar la primaria.
“Los menores que son atendidos actualmente presentarán exámenes en dos semanas y algunos de ellos podrían entrar a la secundaria regular. De los oyentes, tenemos la seguridad de que se interesarán por el estudio y al cumplir 10 años, los podremos atender”, finalizó.