Las empresas tecnológicas están publicitando una nueva tecnología de inteligencia artificial (IA) que puede generar memorandums de negocios o código computacional. Todavía están dilucidando cómo esos productos generarán ganancias.
Las herramientas de IA generativa no están probadas y son costosas de operar, requiriendo servidores potentes con chips costosos que consumen mucha energía. Microsoft, Google, Adobe y otras empresas tecnológicas que invierten en IA están experimentando con una variedad de tácticas para crearla, comercializarla y cobrar por ella.
Microsoft ha perdido dinero con uno de sus primeros productos de IA generativa, dijo una persona con conocimiento de las cifras. Microsoft y Google están lanzando actualizaciones de su software respaldadas por IA con precios más altos. Zoom Video Communications ha intentado mitigar los costos usando en ocasiones una IA más sencilla que desarrolló internamente. Adobe y otros están poniendo límites al uso mensual y cobrando con base en el consumo.
“Muchos de los clientes con los que he hablado no están contentos con el costo que ven por ejecutar algunos de estos modelos”, dijo Adam Selipsky, director ejecutivo de Amazon Web Services, la división de la nube de Amazon.com, hablando de la industria en general.
Tomará tiempo para que las empresas y los consumidores comprendan cómo quieren utilizar la IA y cuánto están dispuestos a pagar por ella, afirmó Chris Young, director de estrategia corporativa de Microsoft.
“Estamos claramente en un lugar donde ahora tenemos que traducir el entusiasmo y el nivel de interés en una verdadera adopción”, indicó.
Crear y entrenar productos de IA puede tomar años y cientos de millones de dólares, más que en el caso de otros tipos de software.
La IA a menudo no tiene las economías de escala del software estándar porque puede requerir intensos cálculos nuevos para cada consulta. Mientras más utilicen los clientes los productos, más caro será cubrir las facturas de infraestructura. Estos costos de funcionamiento exponen a las empresas que cobran tarifas fijas por la IA a posibles pérdidas.
Microsoft utilizó la IA de su socio OpenAI para lanzar GitHub Copilot, un servicio que ayuda a los programadores a crear, corregir y traducir código. Ha sido popular entre los programadores -más de 1.5 millones de personas lo han utilizado y está ayudando a crear casi la mitad del código de los usuarios de Copilot- porque reduce drásticamente el tiempo y el esfuerzo necesarios para programar.
También ha sido una pérdida de dinero porque su funcionamiento es muy costoso.
Los individuos pagan 10 dólares al mes por el asistente de IA. En los primeros meses de este año, la compañía estaba perdiendo en promedio más de 20 dólares al mes por usuario, afirma una persona familiarizada con las cifras, quien dijo que algunos usuarios le estaban costando a la empresa hasta 80 dólares mensuales.
El panorama de rentabilidad de GitHub Copilot y otros asistentes impulsados por IA cambiará si bajan los costos computacionales.
Microsoft ha decidido un precio más alto para su próxima actualización de software de IA. Además de los cargos mensuales habituales -que comienzan alrededor de 13 dólares por el paquete básico de software de oficina Microsoft 365- la compañía cobrará 30 dólares adicionales al mes por la versión con IA. A la función impulsada por IA se le puede indicar que redacte correos electrónicos, cree presentaciones en PowerPoint y elabore hojas de cálculo en Excel de forma independiente.
Google, que está lanzando una función de asistente de IA similar para su software de lugar de trabajo, también cobrará 30 dólares al mes además de la tarifa de suscripción regular, que comienza en 6 dólares al mes.
Microsoft, Google y otros han optado por una tarifa mensual fija, apostando a que los cargos adicionales más altos cubrirán con creces los gastos promedio de operar la tecnología.
Una de las razones por las que los servicios pueden ser tan costosos es que algunos utilizan los modelos de IA más potentes disponibles, que requieren más energía y ejercen más presión sobre los procesadores computacionales para operar que el software estándar o los servicios en la nube.
Por ejemplo, Microsoft está utilizando el software más reciente de OpenAI para sus funciones de IA. La versión, llamada GPT-4, figura entre los modelos de IA más grandes y costosos disponibles.
Usarlo para resumir un correo electrónico es como usar un Lamborghini para entregar una pizza.
Microsoft ha estado explorando el uso de herramientas de IA menos potentes y más baratas para su motor de búsqueda Bing, incluyendo algunas construidas con el software de IA de código abierto de Meta Platforms, mencionaron personas familiarizadas con las discusiones.
Zoom ha desarrollado un software más pequeño y económico para su asistente de IA, impulsado por múltiples modelos, incluyendo los de OpenAI y Meta. Sólo utiliza la IA más potente para las tareas más difíciles.
Zoom no tiene que cobrar extra por la herramienta, que puede resumir juntas y redactar mensajes de chat, porque evita la IA costosa cuando puede, destacó Smita Hashim, directora de producto de Zoom, quien también ha trabajado en Microsoft y Google.
“Estamos bastante sorprendidos e impactados por los altos precios que estamos viendo de algunos competidores”, dijo.
Adobe utiliza un sistema de créditos para ayudar a garantizar que Firefly, su generador de imágenes de IA, no lo ponga en números rojos. Cuando los clientes de Adobe rebasan los créditos mensuales asignados, la empresa reduce la velocidad del servicio para desalentar el uso excesivo.
“Estamos tratando de ofrecer gran valor, pero también protegernos del lado de los costos”, dijo Shantanu Narayen, director ejecutivo de Adobe.
Las empresas anticipan que la IA generativa se vuelva más barata con el tiempo, como sucedió con muchas tecnologías, incluyendo el almacenamiento en la nube y la animación 3D. Es probable que nuevos chips y otras innovaciones reduzcan los costos de procesamiento.
OpenAI redujo el precio que cobra por usar su IA más antigua a principios de este año. Su chatbot viral gratuito ChatGPT utiliza una versión anterior de su software. Quienes quieran un ChatGPT con su versión más reciente deben pagar 20 dólares al mes.
La incertidumbre sobre los modelos generadores de dinero ahuyentó a los inversionistas. Las acciones de empresas vinculadas con IA se han disparado este año.
Las crecientes valuaciones reflejan entusiasmo sobre la promesa de la IA, consideró May Habib, directora ejecutiva de Writer, que construye herramientas de IA generativa para empresas. Indicó que los ejecutivos pronto analizarán más detenidamente los costos.
Con información de THE WALL STREET JOURNAL